La castración o esterilización es una técnica quirúrgica
que reduce y en muchas ocasiones elimina la aparición de conductas sexualmente
dimórficas. Las conductas sexualmente
dimórficas son aquellas que son más frecuentes en un sexo que en otro. Tanto en
perros como en gatos, las conductas sexualmente dimórficas típicamente
masculinas son problemáticas:
• Marcaje con orina
• Monta sexual
• Vagabundeo (roaming)
• Agresividad intrasexual (ofensiva)
• Agresividad territorial (ofensiva)
• Agresividad jerárquica (ofensiva)
En muchas ocasiones se ha utilizado la castración de
forma inespecífica frente algunos problemas de comportamiento para los que esta
técnica no está indicada. Además hay que tener en cuenta que el porcentaje de
éxito de la castración no es el mismo dependiendo del tipo de conducta
problemática, del sexo y de la especie en la que se realice.
Indicaciones
de la castración en perros:
▪ En problemas relacionados con la conducta sexual:
conductas de monta inapropiada o el vagabundeo en busca de hembras en celo.
▪ En problemas de marcaje con orina: hay que tener en
cuenta que solamente se resuelven el 50 % de los casos porque hay otros
factores que intervienen en la conducta, como el aprendizaje y los estímulos
olfativos. Es por esta razón, que la reducción de esta conducta después de la
castración es mucho más importante dentro de casa, porque en la calle
posiblemente hay más estímulos olfativos. Siempre se recomienda la castración
temprana, alrededor de los 6-8 meses, ya que el factor del aprendizaje es muy
importante en el mantenimiento del marcaje y como más tiempo tardemos en
castrar, menor será el porcentaje de éxito.
▪ En problemas de agresividad intrasexual, territorial y
jerárquica: debemos saber que en los casos de agresividad intrasexual ofensiva
la castración tiene una efectividad del 60%. En la agresividad territorial y
jerárquica la castración no tiene tanta efectividad. En otros tipos de
agresividad la castración por sí sola raramente va a resolver el problema.
Indicaciones
de la castración en perras:
En general, la castración en hembras agresivas está
contraindicada ya que eliminamos el efecto calmante de los progestágenos. La
castración en perras solamente está indicada en casos de agresividad ofensiva
durante el celo o las pseudogestaciones.
Indicaciones
de la castración en gatos:
▪ En problemas relacionados con la conducta sexual: en el
caso de los gatos la castración controla con gran eficacia el vagabundeo.
▪ En problemas relacionados con el marcaje con orina:
este problema se soluciona en el 80-90 % de los gatos castrados.
▪ En problemas de agresividad intrasexual: en este caso
de agresividad la castración de los dos machos implicados es muy efectiva, no tiene relación con la edad del
gato ni con el tiempo que se ha manifestado la conducta agresiva, esto sugiere
que la influencia hormonal es mucho más importante que el aprendizaje.
Indicaciones
de la castración en gatas:
En general la castración en gatas está indicada y es muy
efectiva en caso del marcaje con orina durante el estro.
En todos los casos los efectos de la castración no son
inmediatos y se pueden manifestar de forma gradual y no ser aparentes hasta
varias semanas después de la intervención. Por lo tanto es recomendable esperar
8 semanas antes de concluir que la castración no ha sido eficaz.
Es muy importante saber que en otros tipos de problemas
de comportamiento en el perro como la agresividad defensiva, el exceso de
actividad, la conducta destructiva, los miedos y las fobias, la castración no
va a resolver el problema. Igualmente en otras alteraciones en el gato como el
marcaje con orina por estrés, por aversión a la bandeja o por ansiedad por
separación, la castración por sí sola raramente resolverá la conducta.